sábado, 16 de octubre de 2010
Cuando la comida se convierte en un infierno. (alguna parte)
Me desperte por la luz del sol que entraba por la ventana, mi hermana entro en mi habitacion dando gritos, y levantando las persianas.
-¡despierta!-aparto el edredón- hoy comemos en un super buffet libre-grito.
Le di la espalda y me puse la almohada en la cara.
Oí como abria mi armario y me tiraba una camiseta y un pantalon a la cama.
-venga vistete, llevas mucho tiempo durmiendo-al ver que no le hacía caso agarro la almohada y la lanzo a alguna parte de la habitacion- ¡arriba! Me han dicho que en ese buffet la comida esta deliciosa, estoy segura que te encantara.
Si… me encantara de nuevo a esquivar miradas, preguntas, y sobre todo comida...Otra vez sobre la cuerda floja, cansada de dar explicaciones y poner cara de alegría como una idiota. si... creo que estare encantada.
-quiero verte vestida cuanto antes-salio de la habitacion, gritando, buffet buffet buffet por todo el pasillo y las escaleras.
Realmente… quien diría que es mi hermana mayor.
Me reincorpore lentamente y camine somnolienta hasta el baño.
Mire al espejo con rabia, o mas bien, a mi reflejo.
Me di una ducha rápida, y me puse la ropa que mi hermana me tiro a la cama, observe mi creación en el espejo, y antes de derrumbarme frente a el, salí del baño escaleras abajo.
casi muero, jamás había visto un restaurante tan grande y con tantas barras de comida, de todos los tipos, cientos de platos que creaban columnas de remordimiento y espanto alrededor de mi.
Mi familia se abalanzaron sobre la comida como si fueran los últimos manjares que iban a probar en su vida, comían de todo, e incluso repetían varias veces, y me miraban como si fuera una extraña, ¿no comía?.
a los pocos minutos llegaron los interrogantes sobre el porque de mi abstinencia, y una vez más tuve que disimular, engañar, sentirme ridícula y humillada, bajar la cabeza, alzar el cubierto y comer... tragarme mi orgullo el cual cortaba mi garganta en tiras, disfrutar de un acto que me estaba matando por dentro, ser común, y destacar únicamente por alguna carcajada alzada para hacer entender en que era una estupenda velada.
Entonces lo sentí de nuevo, como la piel no es suficiente para cubrir el espantoso pecado que acababa de cometer, todos parecian absortos en sus conversaciones, que nadie se dio cuenta que desapareci, fui al baño, un asqueroso baño que de nuevo fue mi confesor, un baño sucio y repugnante que nada más entrar te producía arcadas, un castigo semejante al error cometido.
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sige!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarmuy bien, asi me gusta =)
¿Por qué no pones mayusculas?